Los 52 centros de la provincia de Burgos disponen de un servicio de mantenimiento en horario de 9 a 14 horas, de lunes a viernes, que atiende las incidencias que se produzcan con personal propio, cuya finalidad es resolver telefónicamente el problema y, en caso de que precise un técnico in-situ, derivar la información al servicio de soporte que se desplazará al centro para resolver la incidencia presencialmente.